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Tres géneros diferentes, con estilos variados dependiendo del gesto empleado, dentro de una figuración de iconicidad variable. La acuarela como técnica común denominador, a la que se le añaden a veces lápiz de grafito o conté, papeles que se introducen como textura, rasgado, etc.
El resultado es una acuarela con vocación de óleo, intensa, pastosa, brillante, quizás por las influencias o gustos personales, más centrados en el óleo que en la acuarela en sí.
Recomendable ver en pantalla grande.
